Los Patriots de New England cerraron su temporada regular 2014 con una derrota por 17-9 frente a los Bills de Buffalo en el partido jugado en el Gillette Stadium la tarde de hoy.
"Siempre nos disgusta perder, absolutamente. No hicimos las jugadas suficientes para ganar pero espero que las hagamos en un par de semanas", expresó Brady durante su conferencia.
Sin duda un partido de bajo nivel para la ofensiva de Brady que se vio imposibilitada de jugar con efectividad tanto en los pases como en el juego por tierra.
Brady, con una línea ofensiva sin Sebastian Vollmer ni Dan Connolly (ambos inactivos la tarde de hoy) solo pudo completar 8 de 16 pases para 80 yardas, el QB estrella de NE jugó bajo una presión constante y fue capturado en 1 oportunidad.
En el juego terrestre las cosas no marcharon nada mejor. En la primera mitad los Pats solo consiguieron 48 yardas en 13 intentos. Al final del encuentro los corredores sumaron un total de 116 yardas en 25 carreras (Blount lideró el grupo con 10 carreras y 62 yds).
Ya en la segunda mitad fue el QB Jimmy Garoppolo quien tomó control de las acciones, el novato no tuvo mejor suerte que Brady; la presión a la que fue expuesto fue constante y la posibilidad de encontrar a sus receptores fue escasa.
Aunque Garoppolo solo completó 10 de 17 pases para 90 yds y fue capturado en 3 ocasiones, el QB consideró que la oportunidad de entrar en acción en un partido de temporada fue invaluable para su aprendizaje.
"Fue una buena experiencia poder salir al campo y jugar en un partido que no sea de pretemporada, eso me ayudará en adelante", dijo el novato QB desde el vestuario.
Garoppolo también desplegó en repetidas ocasiones su habilidad para evadir a los pass rushers.
"Si lo tengo que hacer lo voy hacer. Es una de esas cosas que nunca sabes si lo tendrás que hacer en una jugada. Solo tienes que estar listo para hacerlo", añadió.
El QB de los Bills, Kyle Orton completó 16 de 23 pases, anotó 1 TD y fue capturado en 2 ocasiones por los LBs/pass rushers de New England (Jamie Collins y Akeem Ayers).
Por su parte la defensa no lo hizo mucho mejor, cierto que tampoco contó con algunos de sus titulares como el CB Brandon Browner y LB Dont'a Hightower (no fueron activados) lo que significó una mayor participación de algunos de los suplentes, particularmente del LB Jonathan Casillas quien se encargó de dirigir la defensa.
"Fue importante para mí y para jugadores como el LB Darius Fleming y el DB Duron Harmon, también lo fue para el equipo, así podemos ver lo que tenemos y eso añade valor, saber que tenemos profundidad", dijo Casillas al final del juego.
Dentro de lo negativo de la actuación estuvo una costosa penalidad de 15 yardas (falta contra el QB) cometida en los minutos finales del partido en una situación de 3 y 6.
A pesar de que el juego aéreo de los Bill solo logró un TD, este partido dejó la sensación de una mala actuación por parte de cada línea de la defensa.
"Buffalo vino con mucha energía y nosotros no jugamos de la manera en que sabemos", dijo el CB Darrelle Revis.
Revis, quien al igual que el S Devin McCourty no jugó en la segunda mitad del partido, dijo no saber que tendría una limitada participación.
"No, no lo sabía, esperaba jugar todo el partido".
Dentro de las lesiones por monitorear se encuentra la sufrida por el LT Nate Solder (rodilla). Otras lesiones que parecen ser de menor cuidado son las sufridas por el DL Sealver Siliga y el WR Brandon LaFell quienes también abandonaron el campo.
Conclusión:
Se sabía que este partido sería jugado a "media máquina" y se esperaba que los titulares no vean mucha acción y como fue el caso, jugadores como Julian Edelman y Rob Gronkowski (quien no padece de lesión alguna) ni siquiera fueron activados para el encuentro.
Cierto que uno quiere cerrar la temporada con un triunfo y jugando bien, no cabe duda que esa era la consigna. Pero en vista de los múltiples cambios realizados en la formación y de tener a un rival que lo entregó todo en el campo, las cosas no salieron como se esperaba.
Ahora es momento de dejar este juego atrás y con una semana extra tomar un poco de descanso, curar las heridas y prepararse para enfrentar a un rival aún desconocido el próximo 10-11 de enero.
Para ese entonces esperamos que el equipo, jugando en casa, despliegue su mejor juego de la temporada y empiece con mucha fuerza y actitud el difícil reto que tendrá al frente.
Talento y calidad sobran en el equipo, solo habrá que demostrarlo, ¿quién mejor que Belichick para prepararlos?