Por Victor Pérez | Patriots Madrid
Alegres por esa novena victoria seguida, que nos coloca en lo más alto de nuestra conferencia y con el mejor récord de la NFL. Pero tristes a la vez por el coste que hemos pagado perdiendo piezas de vital importancia para las próximas semanas, volvemos a casa para enfrentar a uno de nuestros enemigos clásicos, los New York Giants y una semana más te detallamos las claves de este enfrentamiento.
Salvar al soldado Maye
Si hay un área que ha mejorado exponencialmente respecto al año pasado, esa es la línea ofensiva, y en concreto su lado izquierdo, donde los novatos Campbell y Wilson han conseguido establecer una protección de calidad en el lado débil de nuestro QB que le ha permitido brillar a nivel MVP en lo que llevamos de competición.
Primero Wilson, con un esguince de tobillo que quizás le llevará a perderse tiempo, aunque será evaluado día a día, y después Campbell, con un problema en su rodilla, que le llevó a que lo colocaron en la reserva de lesionados. Estas lesiones nos hicieron recordar los problemas del año pasado donde los huecos de la OL no permitían a Maye el tiempo necesario para lanzar.
Espero que McDaniel sea capaz de dar una vuelta de tuerca más a este ataque y sea capaz de imponer un juego más corto que permita a Maye lanzar de forma rápida y efectiva e intentar aumentar el número de carreras por el exterior, porque de ello va a depender la salud de Maye y el juego del equipo en ataque.
La NYG Experience
Los New York Giants viven este año en una montaña rusa que les está llevando de la euforia a la desesperación de un día para otro.
Han sufrido lo que pueden ser los últimos momentos de la carrera de Rusell Willson mientras veían caer a su receptor estrella Malik Nabers.
Deciden poner en el campo a su QB rookie, Jaxon Dart, y establece una conexión mágica con Cam Skattebo hasta que el RB cae lesionado para toda la temporada en una desafortunada caída y el mismo Dart tiene que ser apartado dos semanas por una conmoción.
Deciden poner en el campo a Jameis Winston que gana a los Packers y que este fin de semana, pese a la derrota, ofrece uno de esos partidos mágicos donde consiguen llevar al tiempo extra a unos Lions que de no tener a un Jamyr Gibbs con capa de Superman habrían perdido el partido.
Esta semana esperamos que Jaxon Dart pueda volver a jugar y veremos que versión del QB tendremos sobre el campo. Dart, es un jugador muy divertido de ver en los resúmenes del partido pero que si lo tienes en tu equipo puede llevarte a la desesperación. Si le dejas coger ritmo es un jugador con facilidad de "venirse arriba" pero poco cuidadoso con su integridad física y en ocasiones demasiado osado. Por todo esto es muy importante que nuestra defensa sea capaz de limitar sus carreras y forzarlo a ganar el partido con su brazo.
El dominio del tiempo
Pese a los malos inicios en defensa estamos sabiendo manejar a la perfección el timing de los partidos y la gestión que se está realizando desde la banda del tiempo de juego nos está llevando a llegar la mayoría de las ocasiones al descanso con el partido a favor o igualado.
No somos un equipo apto para cardiacos, ya que empezamos a tener una tendencia al sufrimiento en los últimos cuartos que nos están llevando a tener que hacer una gestión del reloj soberbia por parte de Vrabel. El no cometer errores y la confianza en la defensa nos convierten en un equipo de esos a evitar en los momentos donde se decide el partido.
La camisa de trabajo
La pasada semana Mike Vrabel regaló a todos sus jugadores esas camisas de trabajo, lo que los americanos denominan como "blue collared shirt". Son esas camisas azules que llevan tu nombre bordado y que te pones cuando llega el momento de ensuciarse y hacer tu trabajo.
Esta es la mentalidad que necesitamos ya que además de ser un equipo sin grandes estrellas ha llegado el momento de que todos ofrezcan su mejor versión para cubrir el hueco de los compañeros lesionados. Así que en estas próximas semanas lo importante es conseguir la victoria, aunque para ello tengamos que bajar al barro y jugar feo.
Un último esfuerzo antes del BYE
Tan malo es un BYE temprano como un BYE tardío y en nuestro caso se nota que la espera de tan merecido descanso se nos está haciendo un poco larga. Necesitamos este parón para recuperarnos de las heridas de cada batalla y poder llegar a una postemporada, asegurada ya al 99%, en la mejor forma posible.
Así que esta semana aprovechemos el día extra de descanso y demos nuestra mejor versión para llegar al BYE con los deberes hechos. Y a la vuelta de este descanso volvemos a evaluar nuestros objetivos.
Go Pats!!!
